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viernes, 19 de febrero de 2016

Grandes álbumes vocales: "Take 6" (1988)

Hacía tiempo que no retomaba la serie de grandes álbumes vocales y lo voy a hacer hoy con el primer álbum publicado por la excepcional banda a capella Take 6.



Hoy en día proliferan por todas partes las bandas a capella, pero allá por 1988 resultaba de lo más extravagante que un grupo de cantantes se dedicara a cantar sin acompañamiento instrumental, fuera de lo que es el mundo de la música coral clásica.

Por supuesto que no fueron los primeros en hacerlo, pero sí los primeros en conseguir fama mundial además del reconocimiento unánime de la crítica musical.

Ese mismo año de 1988, sin ir más lejos, el genial Bobby McFerrin, un pionero de la música vocal a capella, pero en solitario, no como grupo, lograba un éxito masivo con el álbum "Simple Pleasures", que incluía el archiconocido "Don´t worry be happy", que ya hemos traído alguna vez a este blog.

Take 6 era un grupo revolucionario porque partiendo de la tradición de los grupos de gospel vocal, combinaba influencias de la música coral y la música barbershop y les daba una vuelta de tuerca más con unos endiablados arreglos inspirados en el jazz y cantando nada menos que a 6 partes.

Además resultaba un grupo muy divertido. En este disco con el que debutaron nos presentan nada menos que varias escenas sacadas de la Biblia (Take 6 es un grupo declaradamente evangélico), como en "Mary don't you weep", "Get away, Jordan" o "David and Goliath", y son sin duda algunos de los mejores momentos del disco, tanto por la calidad de los arreglos y el fabuloso empaste de las voces, como por el sentido del humor que destilan las interpretaciones.



Este disco supuso el aldabonazo que colocó a Take 6 en el mercado musical internacional y llamó la atención del afamado productor Quincy Jones, quien se encaprichó con ellos, los reclutó para participar en el megahit "Back on the Block" y les produjo su segundo álbum "So Much 2 Say", que también es un álbum excelente pero al que yo colocaría un peldaño por debajo del álbum de debut.

Y os preguntaréis ¿por qué pongo el álbum de debut por encima del resto de los álbumes de la carrera de Take 6?
Pues porque con todo lo bueno que he dicho que contiene el álbum, grabado en un momento en el que yo creo que la banda había alcanzado ya su máximo nivel de calidad y de creatividad, además este disco contiene dos joyas indiscutibles bajo mi punto de vista, que son "If we ever needed the Lord before (we sure do need Him now)" y "A quiet place".

La primera es un himno religioso con una energía sumamente contagiosa que se mete en tu cabeza y puede estar dentro semanas. La segunda es una maravilla de equilibrio y sensibilidad. Los arreglos de ambas canciones se deben a Mervin Warren, el primer miembro en abandonar la banda tres años más tarde para emprender una carrera de la que ya hemos hablado aquí en alguna ocasión.

Aquí les tenemos, un año antes, en 1987, cuando el grupo aún no se llamaba Take 6 sino Alliance, interpretando "If we ever".



Y aquí la versión del álbum de "A quiet place", con la transcripción de las 6 voces a partitura.







jueves, 8 de octubre de 2015

Sister Act - el Musical: Ha nacido una estrella

Y esta estrella se llama Mireia Mambo Bokele.



Hace unos días tuve finalmente la oportunidad de asistir a la representación del musical Sister Act en su versión española.

Creo que todo el mundo conoce el argumento de la película: una cantante de night club que es testigo de un asesinato y se esconde de sus perseguidores en un convento. Allí convierte el aburrido coro de la congregación en un coro vibrante y exitoso. 

La película era muy divertida y el musical también. El contraste entre el estilo de vida de la cantante y el de las monjas proporciona un montón de situaciones divertidas. Simplemente ver a las monjas correr de un lado para el otro ya nos produce una sonrisa.

Pero además la música tiene un papel aún más importante que el humor. En la película el coro hacía versiones corales sorprendentes de canciones conocidas del soul adaptándolas a la temática monjil. En Sister Act 2 se potenció aún más el aspecto musical contratando a Mervin Warren de Take 6 para las adaptaciones de las canciones y a Lauryn Hill como la alumna conflictiva que descubre su talento como cantante.

El musical hace tabla rasa de todo esto. Se componen canciones totalmente nuevas y originales y el encargado de ello es nada menos que el legendario Alan Menken, compositor de todas esas canciones maravillosas de las películas de Disney. Aquí os traigo un video del propio Alan Menken cantando un puñado de esas canciones (tiene muchas más).




La música de Sister Act el musical es, como no podía ser de otra manera, fantástica, pero la verdadera sorpresa al ver el montaje de la obra en España es la protagonista Mireia Mambo Bokele, una artista que reúne en mi humilde opinión todo lo que es necesario, energía, simpatía, carisma, voz, técnica vocal, capacidad para el baile, para convertirse en una gran estrella de la escena musical.

Mireia consigue que durante la obra no nos acordemos ni una sola vez de Woophi Goldberg.


Os traigo también un link a una entrevista en la que la propia Mireia nos cuenta cómo empezó su carrera musical y sus primeras experiencias en el teatro musical, tanto en Londres participando en el montaje de "Charlie y la fábrica de chocolate" como después en España con la aclamada "El rey león".




lunes, 2 de julio de 2012

Una voz nueva: Esperanza Spalding

No sé si pensáis como yo que la mejor música pop, los mejores cantantes y las mejores canciones provienen de épocas ya algo lejanas, como los años 60-70-80. De hecho casi todos los grandes artistas a los que hemos dedicado aquí un monográfico ya están algo maduritos, se han retirado o incluso han fallecido.

Para que no se me acuse de anticuado y para evitar que este blog se convierta en un blog de música vocal de la tercera edad, he hecho el esfuerzo de pensar en qué nuevas voces de interés han surgido reciéntemente, digamos en los últimos diez años en el panorama musical. Y uno de los pocos nombres que me viene a la cabeza es el de Esperanza Spalding, cantante y bajista nacida en Portland hace 27 años.





Se trata de una artista asombrosa, que ya tocaba varios instrumentos en su más tierna infancia, pero que ha destacado finalmente con el bajo, y también con una voz exquisita, llena de matices, que se funde perfectamente con el sonido de su bajo.

Y aunque su territorio musical es preferentemente el jazz, es una artista con tanta personalidad que trasciende a otros niveles más comerciales y fue capaz incluso de arrebatar el Grammy como Mejor Artista Novel en 2011 a Justin Bieber (razón por la cual las violentas fans de Bieber aún no la han perdonado seguramente).

Es sin duda una artista con muchos de los elementos necesarios para convertirse en una figura, porque además es multicultural (canta también en español y en portugués), y proyecta una imagen hypercool, con su peinado afro y abrazada a su bajo.

A Barack Obama, presidente de los USA, por ejemplo, le gusta mucho, y siempre que puede se la lleva consigo a actuar, ya sea en la Casa Blanca o en la entrega del Premio Nobel de la Paz, que ahora no recordamos muy bien por qué, pero se lo dieron al presidente americano en 2009.
Aquí tenemos una actuación mágica en la mismísima White House.


Por cierto, la canción "Tell him" fue escrita por la otrora gran promesa de la música negra Lauryn Hill, primero solista del grupo The Fugees, quien más tarde nos deslumbró a todos con el álbum "The Miseducation of Lauryn Hill", premio Grammy a Mejor Album del Año 1998, y sin embargo, decidió en determinado momento hacerse a un lado y apartarse de la fama para llevar una vida más tranquila. Esperemos que con Esperanza no nos pase lo mismo.

Aquí tenemos a una Lauryn Hill que ya apuntaba maneras en "Sister Act 2" una pequeña joya de película musical con fantásticos arreglos vocales de Mervyn Warren (ex Take6), de quien ya hemos hablado algún día.