En los últimos meses no hay otra cosa de la que más se hable que de la inteligencia artificial y de los increíbles avances que se han producido en los últimos tiempos y cómo estos avances van a hacer que seguramente cambie por completo nuestra forma de entender el arte y la creatividad.
Porque hasta hace poco pensábamos que los ordenadores y los robots podrían sustituirnos en las labores más mecánicas y racionales y sin embargo lo que nos encontramos ahora es que quizá sean también capaces de ser más creativos que nosotros. ¿Puede ser cierto esto?
En el mundo de la música, como en las artes plásticas, la irrupción de la inteligencia artificial es arrolladora, no sólo como un instrumento que nos permita hacer música con mucha mayor facilidad, sino que esta inteligencia artificial es capaz de alguna forma de "entender" los procesos creativos del ser humano y crear ella misma nueva música de una forma casi independiente.
Como ejemplo traigo unos vídeos que han ido apareciendo en youtube en los que se sustituye la voz de un cantante por la de otro, de una forma realmente sorprendente. La inteligencia artificial lo que hace es "extraer" el timbre de un cantante, digamos que aquello que constituye la identidad de su voz, ese espectro de frecuencias de sonido por el que distinguimos una voz de otra.
De esta manera se han creado "bancos de timbres" de voces famosas, como Frank Sinatra, Michael Jackson o Mariah Carey, por poner un ejemplo, de tal forma que luego puedes "trasplantar" por medio de un software ese timbre a la grabación de voz de otro cantante y "sustituir" un timbre por otro.
El resultado lo podéis comprobar en estos vídeos de ejemplo:
Ray Charles cantando "Sir Duke" en lugar de Stevie Wonder
Frank Sinatra cantando "Bad Romance" en lugar de Lady Gaga
Michael Jackson cantando "Beat it", sustituyéndose a sí mismo con su voz de niño.
Las posibilidades como veis son infinitas y esto no ha hecho más que empezar. Las simulaciones no son todavía perfectas y, aparte del timbre, hay diferencias en cuanto a la imitación de la interpretación que todavía no están logradas, pero todo se andará con el tiempo.
En unos años cualquiera podrá seguramente escribir una canción original y con facilidad hacer que la interprete una voz idéntica a la de algún cantante famoso. Los vídeos de versiones "imposibles" en youtube están proliferando como setas y se abre también un debate sobre cuestiones éticas y legales sobre la propiedad intelectual de la música así creada.
Porque hasta ahora los artistas eran los propietarios de sus interpretaciones pero, ¿son los cantantes los dueños de sus timbres de voz?
Hoy, aprovechando que estamos en junio, que es el mes de las reivindicaciones del mundo LGTBIQ+ por excelencia, vamos a hablar de algo que me intriga mucho. ¿Por qué determinados cantantes son elegidos por el mundillo gay para convertirse en sus ídolos?¿Y por qué otros no? Hoy intentaremos responder a la primera pregunta porque la segunda me parece todavía más complicada y la dejaremos para otro día.
Puede que el público no-gay no tenga en realidad ni idea sobre qué estoy hablando, pero para los gays hay determinados cantantes que se convierten en verdaderos iconos, y ojo que no hablo de que esos artistas se conviertan en abanderados o abanderadas de la causa gay, sino que es más bien al revés, son los gays los que elevan a ese artista a lo más alto y en algunos casos lo convierten casi en un dios (o diosa) y cuidado con criticarlos porque los defenderán con su vida si es preciso.
¿Qué características son las que reúnen estos cantantes para ser "escogidos" por el público LGTBI de entre los demás millones de artistas? Eso es lo que voy a intentar contestar humildemente en este post.
Pero lo haré a través de ejemplos, así que tras muchas horas de reflexión os traigo lo que a mí entender me parece que son...
...¡MIS DIEZ ICONOS GAYS DEFINITIVOS DEL MUNDO DE LA CANCIÓN!
(y no, no incluiré en esta lista a mi adorada Jaimina Johnston)
1. MADONNA
Por supuesto, Madonna, idolatrada desde los años 80 por el gran público, en los últimos años ha ido perdiendo algo de gas en los medios, pero para el público gay siempre ha trascendido su personaje como algo más. Las razones son múltiples y lo cierto es que Madonna lo tiene todo para triunfar entre el público gay, reuniendo varias de las condiciones que se han argumentado a menudo para ello:
-Ser una mujer fuerte, con mucha personalidad
-Escapar del convencionalismo
-Conceder mucha importancia en su carrera a la imagen, con todos esos cambios de look que crean tendencia
-Crear videos transgresores, en los que se mezclan asuntos aparentemente opuestos, como sexo y religión (ese "Like a player" por ejemplo)
-Estar siempre muy atenta y muy influenciada por la estética gay (como en el vídeo de la canción "Vogue")
-Defender activamente la causa LGTBI.
Todas estas cosas y su música, que es música básicamente de baile y de fiesta, pero que tiene también muchas veces un mensaje transgresor detrás (como en "Like a virgin" o "Papa don't preach"), son las que la convierten en un icono gay más que evidente.
2. CHER
Desde luego, pero ¿por qué Cher?
Cher es una cantante no tan famosa en España, al menos hasta hace unos años, pero en EEUU es toda una institución y es probablemente la cantante más imitada por las drags queen de ese país.
La carrera de Cher es muy larga en EEUU y sus éxitos son numerosos, pero me parece que la trascendencia de su "personaje" desborda a lo que es propiamente su carrera musical.
Cher no solo es cantante, también es actriz y ha estado en la música, en el cine y en la tele prácticamente desde siempre. Su personaje es el de una mujer también fuerte, con un punto importante de rebeldía y además su estatura y su complexión le dan cierto aire andrógino, por no hablar de su gusto por la cirugía estética lo que la convierte en una mujer "realmente hecha a sí misma". Todo esto son cosas que al público gay le llegan (una persona que desafía lo convencional y llega a convertirse en lo que realmente siente).
Además es una activista gay y uno de sus hijos es transexual, pero yo creo que realmente la identidad sexual de los cantantes al final no tiene tanto que ver con el hecho de convertirse en iconos gays como los valores que transmite su imagen y su música. De hecho en esta lista adelanto que la mayoría son heterosexuales.
3. JUDY GARLAND
Aquí he tenido mis dudas porque Judy es un icono gay sin duda, pero un icono de otro tiempo y entre la gente de menos de treinta años realmente hay pocos que la conozcan.
Judy Garland es un icono en primer lugar porque es una cantante superlativa. Quiero decir que su talento como cantante es inmenso, sobre todo si nos fijamos en su capacidad de transmitir emociones, de coger una canción y hacerla suya, tan suya que difícilmente la podremos imaginar en la voz de otra cantante. Es lo que pasa con el estándar "Over the rainbow" de la película "El mago de Oz", una película que es en sí misma también un icono para el mundo LGTBI, en la medida que representa escapar de un mundo gris a otro mundo paralelo de color en el que las cosas son distintas y se acepta a los que son diferentes. En EEUU de hecho la expresión "ser amigo de Dorothy" llegó a ser un eufemismo de la palabra homosexual (en relación con Dorothy el personaje de la película interpretado por Judy Garland).
Judy Garland es una cantante de una intensidad tal que en cualquier otra artista la colocaría al borde de la autoparodia, pero de alguna manera ella consigue resultar auténtica.
Autenticidad, expresividad y por qué no decirlo, también su dramática vida personal y su prematura muerte la convierten en un mito eterno de la canción. Y si algo les gusta a los gays es una buena drama queen.
4. ABBA
Doy un triple salto con pirueta y voy de una diva de la canción de los años 50 al discotequero grupo sueco de finales de los 70.
¿Es ABBA un icono gay? Definitivamente sí. Las razones aquí comienzan a parecerme más oscuras, pero es un hecho ampliamente aceptado el particular éxito de la música de Agnetha, Anna-Frida, Bjorn y Benny dentro del mundillo gay.
Se me ocurre en primer lugar que mucha parte del mérito recae en la música en sí misma, unas canciones optimistas, bailables, en definitiva arrolladoras, que en aquellos años a pesar del gigantesco éxito comercial eran atacadas a muerte por los críticos, que veían sus canciones como muy infantiles, especialmente en cuanto a la simplicidad de sus letras.
Sin embargo, desde el principio los gays vieron algo en esas canciones, unas melodías y ritmos sumamente pegadizos, por no hablar de las formidables voces femeninas y el tiempo les ha ido dando la razón, porque hoy en día todas estas canciones son estándares y son himnos, y en aquel tiempo toda la crítica pensaba que su música no valía nada. ¿Sabíais que el grupo ABBA a pesar de vender millones y millones de discos jamás ganó ni un premio Grammy? (realmente los premios Grammy hoy en día no tienen ningún prestigio, pero en aquellos años sí lo tenían).
Y aquí es donde yo defiendo que el mundillo gay tiene un sexto sentido para detectar la calidad más allá de cualquier prejuicio, aunque se presente en una forma aparentemente alejada de la órbita LGTBI; al fin y al cabo ABBA lo forman dos parejas heterosexuales haciendo una música más bien blanca y para toda la familia.
Sin embargo, hay quien también señala que la imagen del grupo resultaba atractiva de algún modo para los gays, con la contraposición de dos mujeres fuertes junto a dos hombres más bien blanditos pero bastante adorables, y los cuatro con aquellos trajes tan brillantes y ceñidos.
Por supuesto, su gran hit "Dancing queen" también puede ser entendido como un guiño al público gay.
5. LADY GAGA
Stefani Joanne Angelina Germanotta es el verdadero nombre de esta cantante que es adorada por la comunidad gay ya del siglo XXI.
Lady Gaga es una artista con un talento innegable que a mí me parece que se ha esforzado muchísimo por llegar al estrellato. Compositora, cantante, actriz..., es de esas artistas que parece que son capaces de llegar a todo. En cierto modo, su carrera parece estar influenciada y seguir los pasos de otro de los iconos que hemos comentado anteriormente, que es Madonna.
Sus looks extravagantes contribuyeron mucho a darla a conocer, por una originalidad y un amor al riesgo que no pasaron inadvertidos para el público gay. Pero es su música sin duda la que la ha convertido en un auténtico icono gay, con canciones que apelan a formas no convencionales de amor, como "Poker face", "Bad romance", o a la autoafirmación de la propia personalidad, como "Born this way", que es todo un himno LGTBI.
La cantante además es una abanderada de la causa gay y hace campaña siempre que puede.
6. DIANA ROSS
La gran diva de la música Motown tiene una carrera con éxitos a lo largo de varias décadas y su prestigio como cantante está más que establecido en la historia de la música popular, pero para el mundillo gay Diana Ross siempre será algo más: la imagen del glamour. Sus looks han sido también imitados hasta el infinito por las drag queens de varias generaciones. Frente a la imagen fuerte que hemos visto de otros iconos gays como Madonna o Cher, Diana Ross propone la viva imagen de la femineidad. En su música también se refleja una fuerte influencia de la estética gay, sobre todo en los años 70 cuando se convierte en una diva del disco con canciones como "I'm coming out" que se convierte desde el principio en uno de los himnos gays por excelencia.
7. PRINCE
El genio de Minneapolis es también uno de los artistas favoritos para una parte importante de la comunidad LGTBI. Es curioso porque Prince es un personaje bastante contradictorio y a pesar de su imagen andrógina y el hecho de aparecer siempre maquillado y con looks realmente transgresores e hipersexualizados (sobre todo al principio de su carrera), lo cierto es que la temática de sus canciones raramente ha abordado la homosexualidad de una forma abierta y su nivel de activismo LGTB era nulo.
En mi opinión, si Prince tiene más éxito entre el público gay es simplemente por la falta de prejuicios; para muchos heterosexuales resulta difícil darle una oportunidad a un cantante con una imagen tan ambigua y una parte muy importante del negocio del rock es ofrecer una imagen muy masculina, tanto como objeto de deseo (para ellas) como sujeto con el que identificarse (ellos).
Por otra parte también es verdad que su música reúne muchas de las claves que suelen estar detrás del éxito de un artista entre el público gay, como el ser una música muy bailable, la imaginación desbordante, el gusto por el barroquismo, las letras con referencias sexuales atrevidas, etc.
8. BARBRA STREISAND
Ahora ya tiene casi 80 años pero en un tiempo Barbra Streisand lo fue todo en el mundo del espectáculo y era también adorada por el público gay. Mujer de fuerte personalidad, muy inteligente, polifacética y adelantada a su tiempo, actriz oscarizada, cantante sublime, directora de cine...
Musa del feminismo y musa también del mundo gay, la propia artista cuenta que en el comienzo de su carrera el público gay fue el que primero la aupó al estrellato.
Y recordar también esos looks fastuosos de los años 60, defendiendo un concepto de belleza diferente al que el mundo estaba acostumbrando.
9. MONICA NARANJO
Y ya pasando a territorio español, no podemos dejar de mencionar a la diva Mónica Naranjo, cantante portentosa, mujer de gran personalidad que tuvo que irse de su país natal a hacer las américas para poder triunfar porque aquí no comprendían su talento. Finalmente vuelve a España y su éxito es clamoroso, dime si eso no es la fantasía gay definitiva.
Adorada por la comunidad LGTBI, ella misma se declara bisexual, pero nos da lo mismo. Canciones como "Desátame" o "Sobreviviré" son la expresión misma de la lucha por el derecho a ser diferentes y la superación ante la adversidad.
10. ALASKA
Y cómo no, no podía faltar Olvido Gara, la gran musa de la movida, la artista que ha pasado por todas las épocas de la música pop en España sin perder un ápice de su personalidad, demostrando que no hay nada mejor que ser auténtica para no pasar nunca de moda.
Cuarenta y cinco años lleva cantando "A quién le importa", el himno gay por excelencia en España, aunque otros muchos temas de su larga carrera son también santo y seña de la comunidad gay, desde sus tiempos con Alaska y Los Pegamoides hasta la época actual con su eterno compañero en la música Nacho Canut formando Fangoria.
Lo sé, muchos artistas me he dejado en el tintero, pero solo podíamos poner diez.
Entre otros podíamos haber incluido a Elton John, George Michael, Freddy Mercury, Maria Callas, Cindy Lauper, Janet Jackson, Whitney Houston, Mariah Carey, Britney Spears,.. y en lengua española se me ocurren Lola Flores, Rocío Jurado, Raphael, Chavela Vargas... Todos y todas con razones suficientes para figurar también en esta lista.
Y me despido con mi adorada Jaimina Johnston, que también en su último álbum "Beating Heart" hace un guiño al público LGTBI con la canción "One fine day", una canción llena de buenos sentimientos y de esperanza en un día en el que los prejuicios serán cosa del pasado. Os dejo el vídeo.
La crisis de público de la música clásica no es un asunto nuevo.
Desde hace ya décadas se asume que la música clásica está dirigida a una minoría: una minoría entendida, una minoría selecta, una minoría cultivada y una minoría además añosa. Todos estos clichés se aplican habitualmente a la gente que tiene costumbre de escuchar música clásica.
La falta de entendimiento entre la música clásica y la música popular además es recíproca, porque tanto empeño pone el común de las gentes en huir de las salas de concierto como los propios músicos "clásicos" en poner barreras que impidan que la gente llana acceda a comprender y amar la música denominada "culta".
Pero a fin de cuentas, ¿tan diferentes son la música clásica y la música popular?
Mi humilde respuesta es un rotundo NO.
Tanto la una como la otra están hechas de lo mismo, de notas, armonías, ritmos, y las mayores diferencias estriban en la forma en la que una u otra nos presenta el resultado.
El Magnificat de J.S: Bach son notas musicales
El Bad Romance de Lady Gaga también son notas musicales
Por supuesto que la mayor parte de la música considerada clásica tiene el prestigio de haber persistido vigente durante siglos, (haber superado la prueba del tiempo) pero incluso la creación más genial de Bach o de Mozart no deja de ser lo que hemos dicho: notas, armonías, ritmos. Y quién nos dice que dentro de muchos años no seguiremos disfrutando igual que ahora con las canciones de los Beatles, por poner un ejemplo.
Pero volviendo a la pregunta del título de este post, ¿cuáles son esas razones por las que la mayor parte del público no tiene ningún interés por la música clásica?¿Es porque son todos unos ceporros sin sensibilidad alguna? Mi opinión es que no; es la forma en la que la música clásica nos es presentada la que hace que esté en franca inferioridad cuando tiene que "competir" con la música popular.
Ahí van cinco razones:
RAZON NUMERO 1: MUSICA Y VOZ
Al ser humano le encanta la música cantada y por eso el 99% de la música popular tiene como protagonista la voz. En la música clásica en cambio predomina la música instrumental y eso engancha menos al público. De hecho, las formas cantadas de la música clásica como la ópera o las obras corales son las que aún consiguen suscitar cierto interés entre el público general.
RAZON NUMERO 2: LAS FORMAS DE LA MÚSICA CULTA
A la gente común le produce auténtica alergia toda esa terminología de sinfonía, cantata, sonata, motete, lied, oratorio, suite, preludio, minueto, poema sinfónico, scherzo y otros muchos que me dejo en el tintero. La mayoría de la gente solo distingue entre A: Canciones y B: Músicas. Vamos, que es escuchar eso de Opus número no se cuántos y cambiar de canal.
RAZON NUMERO 3: LOS CANTANTES LIRICOS
Ya hemos aludido alguna vez en este blog a las diferencias entre las voces líricas y la forma de cantar de la música ligera. No vamos a negar aquí el esfuerzo y los años de preparación que exige el canto lírico, pero sí vamos a señalar que la mayor parte del público prefiere una forma de cantar más natural, más cercana a la voz hablada y sobre todo, sin ese exagerado vibrato que hace que a veces no se les entienda lo que cantan.
RAZON NUMERO 4: EL IDIOMA
Y hablando de no entender lo que se canta, ¿qué podemos decir de todas esas corales cantadas en latín, o de las óperas cantadas en alemán, en francés, o en italiano en el mejor de los casos? El mensaje es por lo menos el 50% del valor que tiene la voz humana, único instrumento que aúna música y texto. Cierto es que ahora suelen ponernos subtítulos, que ayudan y mucho a seguir una ópera, pero solo por un momento imaginemos un concierto de pop o de rock que necesitara subtítulos para enganchar al público.
RAZON NUMERO 5: LA EXPOSICION CONTINUA Y LA PROPAGANDA
Nunca amamos una canción o una pieza musical la primera vez que la escuchamos. La exposición repetida es la que hace que prenda en nuestro interior. Siempre me ha parecido ilusorio acudir a un concierto de música clásica, escuchar una obra que no hemos oído nunca antes y pretender que nos encante a la primera. Como mucho diremos que nos parece interesante, que promete o que nos recuerda a otra que nos gusta. En los conciertos de pop o rock el público acude con los deberes ya hechos y se sabe las canciones de pe a pa, porque las discográficas se encargan de promocionarlos extensamente en la radio, en las televisiones, en los anuncios. Si el público acude a un concierto de música clásica sin conocer nada de la obra, lo más probable es que se quede dormido a mitad del concierto y no vuelva al siguiente.
Classical Crossover
Por todas estas razones queremos rendir hoy homenaje en este blog a todos esos artistas que han intentado sortear este abismo aparentemente insalvable entre la música clásica y la música popular. Son conocidos como los artistas del classical crossover, término que podríamos definir como aquellos que adoptan fuentes o influencias de la música clásica para llevarlos al terreno de la música popular y alcanzar una imagen más comercial y llegar a un público más amplio.
He encontrado este enlace en el que lo explica todo maravillosamente bien, las distintas formas de hacer classical crossover, las tácticas que emplean las discográficas para explotar este mercado y también algunos ejemplos de los artistas más conocidos en esto de llevar la música clásica a las grandes masas, que son sobre todos cantantes, como el éxito universal de Los Tres Tenores (Luciano Pavarotti, Plácido Domingo y José Carreras)
Muchos puristas se rasgan las vestiduras, pero espectáculos así acercan la música clásica a un público que de otra manera no llegaría a conocer nunca la belleza de este aria de Puccini, (aunque muchos lo llamarán temazo en lugar de aria, lo que viene a ser lo mismo).
A la estela del éxito de los tres tenores, hemos tenido más tarde la oportunidad de conocer a Andrea Bocelli, cuyo caso es diferente porque es más bien un cantante de música ligera con algunos registros de tenor y canta canciones que no son de ópera pero se dan un aire. El éxito de Con te partiró fue también enorme.
El avispado productor de la compañía Sony Simon Cowell, conocido también por su labor de jurado en Factor X, vio enseguida el potencial comercial y creó el grupo Il Divo, un grupo de cantantes iniciados en el canto lírico, que no son italianos pero lo parecen (importante para el éxito), y que cantan canciones pop pero intentando sonar a ópera.
Yo no sé si esto se puede seguir considerando classical crossover o ya es descaradamente música pop para fenómeno fan, como se desprende de los comentarios del siguiente vídeo. Vosotros mismos podéis juzgar.
