viernes, 4 de octubre de 2013

Voz de falsete: mitos y realidades

La voz de falsete (o "falsetto") es un tipo de registro vocal que consigue tonos más agudos que el registro natural (o modal), permitiendo al cantante acceder a notas más altas (más agudas), aportando por lo general hasta una octava suplementaria por arriba a la tesitura natural del cantante.

Desde el punto de vista fisiológico, la voz de falsete emplea solamente la vibración de la parte mucosa de las cuerdas vocales, sin implicar al cuerpo de las cuerdas vocales.



En realidad, el proceso de la emisión en falsetto no está del todo claro sino que más bien parece que puede variar entre unos cantantes y otros. Para empezar, aunque muchos expertos sostienen que el falsete pueden realizarlo tanto hombres como mujeres, hay escuelas que niegan esta posibilidad en la voz femenina y prefieren emplear en ellas únicamente el término (algo ambiguo quizás) de voz de cabeza.

Otros expertos en cambio reconocerían en las mujeres un registro de pecho, otro de cabeza y finalmente un falsete, pero lo cierto es que los estudios científicos no muestran una evidencia clara de diferencias entre los dos últimos tipos.

Como veis, el asunto resulta bastante lioso. Lo que parece claro es que la voz en falsete por lo general logra un volumen de sonido menor que la voz natural, además de que su timbre es diferente y, especialmente cuando no está bien trabajado, su sonoridad puede resultar algo opaca o nasal.


A lo largo de la Historia de la música vocal, el falsete ha tenido ciclos sucesivos de auge y decadencia, tanto en el campo de la música clásica, como en el de la música ligera moderna. No podemos decir que la voz de falsete sea mejor ni peor, sino que en un determinado momento puede estar más de moda o más demodé.

El falsete ha sido empleado especialmente por las voces masculinas y sobre todo por las voces de barítono, consiguiendo en ocasiones imitar y hasta suplir a las voces femeninas, especialmente desde que se prohibió el uso de los castrati (quienes en realidad no usaban el falsete, sino que simplemente tenían voz de mujer, por lo cual se prefiere utilizar en su caso el término sopranista)

En cambio, el término contratenor se suele emplear para los cantantes especializados en cantar en falsete con una técnica vocal específica dirigida a potenciar la sonoridad de su timbre y el volumen del sonido emitido.

Aquí tenemos al vitoriano Carlos Mena, uno de los contratenores más reputados del mundo, gracias a una técnica, una musicalidad y una sensibilidad ciertamente exquisitas.




En la música popular del siglo XX, la introducción del micrófono hace que el falsete no quede en tanta desventaja a cuenta de su menor potencia de sonido, y aparece un renovado interés por el falsete, por ejemplo como hemos comentado en este blog en una entrada previa sobre el canto yodel, (que no deja de ser una forma particular de empleo del falsete).

Pero hablar sobre la evolución del uso del falsete en la música popular es un tema cuyo interés nos da  por lo menos para otro post. 

1 comentario:

mistergabo2 dijo...

Le recomiendo leer mi artículo:
(mistergabo2.blogspot.com)La realidad es muy diferente a lo que se dice.